Come kéfir para mejorar tu digestión
El kéfir es un producto lácteo espeso y fermentado, elaborado con bacterias lácticas y levaduras, con un suave sabor a levadura. Otros productos lácteos fermentados similares al kéfir son la leche agria, el A38, el ylette, el ymer, el yogur, la crema fresca, el yogur bajo en grasa, la leche entera y el skyr.
Según el diccionario danés, la palabra kéfir es rusa, pero tiene su origen en el idioma turco y significa alegría, placer y embriaguez.
El kéfir es un alimento probiótico que contiene hasta 30 tipos diferentes de bacterias beneficiosas. Estas bacterias lácticas ayudan a fortalecer el sistema inmunitario y a combatir bacterias dañinas y carcinógenas.
Además, es excelente para mejorar la digestión. Puedes comprar kéfir en casi todos los supermercados y es una bebida que deberías consumir con frecuencia para proteger tu salud.

¿Cómo se hace el kéfir?
El kéfir es una bebida fermentada elaborada con granos, bacterias y levaduras. Se puede preparar con leche de arroz, leche de soja, leche, leche de coco e incluso agua de coco. El kéfir es una bebida probiótica apreciada y consumida desde hace siglos en Europa del Este.
Se dice que el kéfir fue descubierto accidentalmente por pastores que fermentaron leche, la cual resultó ser kéfir. El kéfir se popularizó entre la población y en aquella época se le atribuían propiedades curativas.
Los médicos rusos estudiaron el kéfir y descubrieron que, al parecer, tenía la capacidad de curar diversas enfermedades. Hoy en día, es muy popular en todo el mundo. Hay muchas opciones para comprarlo, pero también puedes prepararlo tú mismo en tu cocina.
Simplemente busca recetas de kéfir en línea para empezar. Puedes añadir kéfir a batidos, guisos, sopas, desayunos y muchos otros platos.
Es importante asegurarse de consumir kéfir o alimentos probióticos similares unas cuantas veces a la semana para proteger su cuerpo de enfermedades.

El kéfir contiene bacterias probióticas que proporcionan un buen sistema inmunológico.
Varios estudios han demostrado que el kéfir contiene muchas bacterias probióticas que refuerzan el sistema inmunológico. El kéfir defiende el estómago contra bacterias dañinas como la salmonela y otras infecciones del estómago.
Tiene propiedades antimicrobianas y combate la cándida. También puede reducir el colesterol y la presión arterial.
Los estudios también han demostrado que el kéfir tiene la capacidad de combatir los microbios en el intestino, además de dar fuerza al cuerpo y combatir la fatiga física.
El kéfir protege tus huesos
El kéfir está repleto de calcio, que protege y fortalece los huesos; la vitamina K2 es esencial para la absorción del calcio.
Contiene sustancias bioactivas que ayudan al cuerpo a absorber el calcio y fortalecer los huesos. Como alimento probiótico, el kéfir mejora la absorción de nutrientes importantes en el organismo.
Además contiene todos los nutrientes necesarios como fósforo, calcio, magnesio, vitamina D y vitamina K2, que tienen la capacidad de fortalecer los huesos.










